El Plan México apuesta por la formación tecnológica y la solidez educativa para detonar la prosperidad compartida en nuestro país.
Una visión de largo plazo para el desarrollo nacional
La administración de la presidenta Claudia Sheinbaum trabaja en la conformación del Plan México, una estrategia que busca alinear esfuerzos y recursos para impulsar el crecimiento económico y social de la nación. Si bien su alcance abarcará todo el sexenio, la idea central es que este proyecto trascienda con resultados duraderos más allá de los próximos seis años, sirviendo como pilar para la transformación de las siguientes generaciones. De acuerdo con los primeros lineamientos, el Plan México se nutrirá de múltiples foros y diálogos con diversos sectores a lo largo del territorio, culminando en el Plan Nacional de Desarrollo que orientará los principales ejes de política pública.
El objetivo general es fortalecer la capacidad tecnológica y científica del país, enfocándose en la formación de capital humano calificado y la ampliación de oportunidades para más jóvenes. La presidenta Sheinbaum confía en que, si México consolida su base de ingenieros y técnicos, podrá posicionarse en un entorno altamente competitivo, generando empleos de calidad y mejor remunerados. Para alcanzar esta meta, se plantea la incorporación de 150 mil profesionistas y técnicos cada año, sumándose a los ya existentes.
Actualmente, nuestro país se encuentra entre los tres primeros lugares a nivel mundial en cuanto a número de ingenieros graduados, pero el reto es sostener e incrementar este ritmo de formación para adaptarlo a las exigencias de la industria 4.0. El Plan México, por tanto, no se limita a una visión de infraestructura o crecimiento económico en general; va más allá al enfocarse en la educación como el motor que impulsa la innovación y la tecnología.
Programas para el Bienestar en el centro de la estrategia
Para apuntalar la formación de más técnicos y profesionistas, el Plan México contempla dos Programas para el Bienestar enfocados especialmente en el nivel de educación media superior. Estos son la Beca Universal Benito Juárez y La Escuela es Nuestra. La inclusión de dichos programas responde a la necesidad de reforzar la permanencia en las aulas y la mejora continua de las instalaciones, garantizando que los jóvenes no abandonen sus estudios y dispongan de espacios adecuados para su desarrollo académico.
Este 2025, el Gobierno de México aspira a entregar la Beca Benito Juárez a más de 4 millones 200 mil estudiantes de preparatorias públicas, con una inversión superior a los 40 mil millones de pesos. En un país donde muchas y muchos jóvenes deben trabajar para apoyar la economía familiar, un respaldo económico regular puede marcar la diferencia entre continuar la trayectoria escolar o desertar. Además de asegurar acceso, el gobierno también pretende que estos recursos promuevan la equidad y la inclusión, de modo que nadie quede rezagado por razones financieras.
Mientras tanto, La Escuela es Nuestra expandirá su cobertura a 6 mil 200 planteles de bachillerato, con una inversión global de más de 4 mil 600 millones de pesos. Este programa otorga recursos directamente a las comunidades educativas, permitiendo que docentes, estudiantes, madres y padres de familia elijan qué mejoras requieren sus instalaciones. Desde mantenimiento básico hasta la adquisición de equipo especializado, las decisiones se toman de forma participativa, lo que fortalece la corresponsabilidad y transparencia. Con ello, se espera incrementar la calidad de la enseñanza y dotar de infraestructura acorde a las necesidades actuales.
Nuevas modalidades en la educación media superior
Uno de los esfuerzos recientes del gobierno es la integración de los 31 subsistemas de bachillerato en el Sistema Nacional de Bachillerato. Bajo esta estructura unificada, se propone simplificar la oferta en dos modalidades: el bachillerato general y el bachillerato tecnológico. Con esta medida, al finalizar sus estudios, todos los estudiantes obtendrían un Certificado Único de Bachillerato Nacional, garantizando un reconocimiento estándar y la posibilidad de acceso equitativo a la educación superior.
La modalidad tecnológica incorporará, además, una educación dual que ofrece formación profesional o tecnológica reconocida por el Instituto Politécnico Nacional (IPN) o el Tecnológico Nacional de México (TecNM). De esta forma, la juventud que egresa de bachilleratos tecnológicos podrá acceder tanto al mercado laboral como a estudios universitarios con mayor facilidad, sumando preparación académica y experiencia práctica. Estas reformas buscan consolidar la competitividad del país en un panorama global donde la innovación y la especialización tienen un peso cada vez mayor.
Un paso más hacia la prosperidad compartida
El Plan México también pone el acento en que los futuros profesionistas y técnicos se formen en campos con gran potencial de crecimiento. Desde la industria automotriz hasta las energías renovables, pasando por el sector aeroespacial y las tecnologías de la información, el país posee una base sólida que se puede robustecer con la adecuada formación de talento. El fin último es que México avance en el escalafón de las economías globales, superando el lugar 12 que ostenta en la actualidad y posicionándose entre los 10 primeros lugares.
Claro está que, para llegar a esa meta, se requiere de empleos bien remunerados y condiciones laborales justas, algo que solo es posible si las empresas encuentran en el país personal altamente capacitado y con las competencias requeridas. De esta manera, el Plan México pretende reducir la brecha de la desigualdad y la pobreza a través de mejores oportunidades laborales, apuntando hacia una prosperidad compartida. No se trata únicamente de cifras de crecimiento económico, sino de la calidad de vida de la gente.
ENTÉRATE DE: Pensión Hombres Bienestar: Apoyo económico para hombres de 60 a 64 años
Conclusiones: un impulso inédito para la educación y el empleo
En síntesis, el Plan México surge como una propuesta integral para sentar las bases de un desarrollo tecnológico y científico sostenible. Con dos Programas para el Bienestar especialmente dedicados a la educación media superior, se busca incrementar la cobertura de la Beca Benito Juárez y extender La Escuela es Nuestra a más planteles de bachillerato. Además, la unificación de los subsistemas educativos en una sola plataforma —con modalidades de bachillerato general y tecnológico— responde a la aspiración de unificar el contenido formativo y fortalecer la vinculación con el ámbito industrial y laboral.
La meta no solo pasa por elevar estadísticas y rankings, sino también por gestar oportunidades reales de crecimiento para la juventud. Serían estos jóvenes quienes, al egresar con competencias técnicas y profesionales, potenciarán el salto económico que el país necesita para competir con fuerza en el ámbito global. De esta forma, la administración de la presidenta Sheinbaum traza un horizonte donde la innovación y la preparación académica se convierten en ingredientes esenciales para una economía pujante y un tejido social más equitativo.
Con la mira puesta en la educación de calidad, el fomento tecnológico y la creación de empleos dignos, el Plan México aspira a convertir a nuestra nación en un referente de progreso. Para quienes deseen involucrarse o dar seguimiento a esta hoja de ruta, los foros y espacios de participación ciudadana en todo el territorio se vislumbran como la oportunidad de reforzar y complementar los ejes planteados. En la visión de prosperidad compartida que impulsa el gobierno, cada estudiante que avanza en su formación representa un paso más hacia el México próspero, inclusivo y sostenible que se pretende construir en los próximos años.
El Plan México es una estrategia a largo plazo para avanzar del lugar 12 al 10 entre las principales economías del mundo.
— Gobierno de México (@GobiernoMX) January 15, 2025
¡Vamos unidos hacia delante!
Conoce más en:
🌐 https://t.co/opRfvcp1Lc pic.twitter.com/x7I2yZWRXa
